Según las acusaciones, Apple estaría utilizando su capacidad de demanda para solicitar muchas más memorias de las que en verdad termina comprando, obteniendo precios muy bajos por las mismas (ya que los proveedores cuentan con un exceso de stock al finalizar la etapa de producción).“Apple debería ser culpada ciertamente de deteriorar el ciclo de la oferta y la demanda en el mercado global de las memorias flash. Apple ha encargado una determinada cantidad de chips a los fabricantes coreanos de semiconductores para sus productos digitales, solo para luego comprar realmente un volumen menor. La compañía no realiza compras inmediatas, sino que espera hasta que los precios caigan hasta el nivel que buscaban internamente”.
Web: The Korea Times